Noticias hoy
    En vivo

      Coronavirus en Estados Unidos: la emergencia desnuda la crisis del sistema y las fallas de liderazgo

      La falta de insumos en hospitales en la primera potencia del mundo causa asombro. Desconcierto por las declaraciones de Donald Trump.

      Coronavirus en Estados Unidos: la emergencia desnuda la crisis del sistema y las fallas de liderazgoEl alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, y su esposa, durante un homenaje a trabajadores de la salud en el Hospital Kings Country de Brooklyn, este sábado./AP
      Redacción Clarín

      La pandemia de coronavirus en Estados Unidos dejó al descubierto graves falencias política en el sistema sanitario y la falta de un liderazgo lúcido para enfrentar una crisis de este nivel en la primera potencia mundial. Esto quedó en evidencia con las carencias de insumos básicos en algunas ciudades, inclusive en Nueva York, y las sugerencias del presidente de la Nación sobre el uso de desinfectante para combatir el virus, lo que sembró confusión en una población desinformada.

      Las diferencia de criterio entre las autoridades nacionales y las estatales sobre cómo reaccionar ante la propagación del Covid-19 llevó a los expertos en salud a reclamar una estrategia más coordinada. El temor es que un enfoque disperso sólo prolongue la dificil situación en el país, que ya se está acercando a millón de infectados y supera los 52.000 muertos.

      Cuando la pandemia llegó a territorio estadounidense fue recibida con una cascada de errores e incompetencias de un sistema que se consideraba preparado para proteger, prevenir y combatir cualquier plaga. Nada de eso ocurrió y la amenaza molecular que plantea el nuevo coronavirus puso en duda el vanidoso concepto del “excepcionalismo estadounidense”.

      Una nación con un poder sin igual, ambiciosa y que siempre se ubicó en la cima del mundo no pudo ofrecer suficientes hisopos de testeo a pesar de que su presidente declarara un virtual estado de guerra e invocara poderes especiales para asegurar el suministro de insumos vitales.

      Las declaraciones de Donald Trump sobre el uso de desinfectantes causaron desconcierto. /BLOOMBERGLas declaraciones de Donald Trump sobre el uso de desinfectantes causaron desconcierto. /BLOOMBERG

      Situaciones insólitas

      Esta crisis fue escenario de circunstancias insólitas. Los médicos de Nueva York, por ejemplo tuvieron que mendigar cobertores para la lluvia porque no se los suministraban. “¡Ponchos para la lluvia! ¡En el 2020, En Estados Unidos!’’, dijo incrédulo el empresario Marc Andreessen.

      En el hospital Baystate Health de Massachusetts no conseguían barbijos. Un ejecutivo del centro sanitario, el doctor Andrew W. Artenstein, tuvo que hacer una maniobra casi de espionaje con un amigo para obtenerlos. Según contó, descubrió que un depósito a cinco horas de auto tenía los barbijos. Entonces organizó la partida de dos grandes camiones hacia allí, que tuvo que hacer pasar por transporte de alimentos para sortear los controles del Departamento de Seguridad Nacional. Inclusive tomaron distintas rutas por si uno de ellos era interceptado.

      “Nunca pensé que en mi condición de líder de un sistema de salud que trabaja en un país rico, altamente desarrollado, con lo mejor de la ciencia y la tecnología y un talento increíble, que mi organización enfrentaría este tipo de circunstancias”, dijo Artenstein. “Da la impresión de que no viene la caballería en ayuda”, remató.

      EE.UU. tiene el sistema de salud más caro del mundo. En conjunto entre el sector privado y público consume el 17% de la economía, un porcentaje sin paralelos en el planeta. Pero son débiles las respuestas ante la pandemia. La potencia norteamericana cuenta con joyas médicas que son la envidia global, como los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y los Institutos Nacionales de Salud. Sin embargo, los resultados no los ve la población.

      Fueron mucho más efectivos con las pruebas de diagnóstico del coronavirus países como Alemania, Emiratos Arabes Unidos o Nueva Zelanda que se apresuró a realizar testeos masivos antes de que muchos se enterasen de que estaban enfermos.

      Habitantes de Nueva York toman aire este sábado, pese a las restricciones para evitar los contagios de coronavirus. /AFPHabitantes de Nueva York toman aire este sábado, pese a las restricciones para evitar los contagios de coronavirus. /AFP

      También Corea del Sur, país al que tuvo que recurrir el gobernador republicano de Maryland, Larry Hogan, quien aceptó un avión con 500.000 pruebas proveniente de Seúl para compensar el déficit en EE.UU. La ayuda fue llamada pomposamente “Operación de Amistad Duradera”.

      En numerosos hospitales se quejaban de la falta de guantes, respiradores complejos, laboratorios especiales, exámenes, hisopos, barbijos y otros elementos esenciales. “Estas fallas monumentales a nivel institucional se harán sentir el resto de la década”, advierte Andreessen, investigador del campo de la tecnología.


      Mirá también

      A pesar de todo, Trump usa sus informes diarios en la Casa Blanca para pintar una respuesta exitosa a la crisis y hablar de sus peligrosas teorías científicas. Este jueves provocó un verdadero caos al sugerir como cura mágica “inyectarse” desinfectantes. “Vemos que el desinfectante lo mata (al virus) en un minuto. Un minuto. Si hubiera una forma que pudiéramos hacer eso, por ejemplo con una inyección dentro, como una limpieza”, planteó. Después reaccionó y argumentó que lo había dicho en forma sarcástica. Pero ya era tarde.


      Mirá también

      En las 18 horas posteriores a los comentarios de Trump, el Centro de Control de Envenenamientos de Nueva York recibió más de 30 llamadas de alerta por el uso indebido de desinfectantes. Solo en el estado de Maryland los equipos de emergencia recibieron más de cien llamada de ciudadanos que querían saber si inyectarse lejía era realmente una cura para Covid-19. “Habrá quienes piensen que es una buena idea. La sugerencia de Trump no es algo algo nimio, algo dicho al pasar, una idea de que quizá esto funcione. Es peligrosa”, advirtió Craig Spencer, especialista de la Universidad de Columbia.

      Fuente: AP, EFE y AFP


      Tags relacionados