Fuerte aumento del número de muertes por inseguridad en Provincia: 70% más que en el primer trimestre del 2020

Milagros Silva (21) salió a comprar una gaseosa para la cena, en Morón. Matildo Nieva Santos (57) hacía un viaje por Grand Bourg para una aplicación. Alejandro Jesús Sagripanti (44), un policía retirado, manejaba su moto por Burzaco para ir a visitar a un amigo. María Daglio (56), psicóloga, hablaba por celular en la vereda con una paciente, en Ramos Mejía.

Nombres y vidas reales en distintas situaciones cotidianas en el Conurbano bonaerense con un mismo final tan trágico como absurdo: morir por la inseguridad.

El primer tramo de 2021 no fue nada auspicioso en un rubro que hace décadas es desesperante. Un repaso por los casos que cobraron trascendencia pública muestra que entre enero y marzo hubo un 70% más de muertes en ocasión de robo que en el mismo período hace un año.

En los primeros tres meses murieron 53 personas en hechos de inseguridad en la Provincia de Buenos Aires. Son 22 más que en el primer trimestre de 2020, cuando fueron 31. Las cifras incluyen tanto a víctimas como a ladrones. El aumento es del 70%.

Si bien el relevamiento puede no ser representativo sobre la cantidad de hechos delictivos que hay todos los días en territorio bonaerense y no tienen un desenlace fatal, a priori muestra que la inseguridad crece y es cada vez más violenta.

Los casos representan un robo que terminó en muerte cada 40 horas durante el primer trimestre. En todo 2020 hubo uno cada 56 horas. Claro está que las cifras del año pasado están alteradas por el efecto de la cuarentena obligatoria por el coronavirus, cuando el escaso movimiento en las calles derivó en menor cantidad de delitos.

De los 53 hechos, el 60 por ciento corresponde a víctimas de robos (32) y el 30% a ladrones (20). Clarín cotejó los datos con fuentes judiciales, que señalaron que hasta el momento llevan contabilizadas 30 víctimas fatales por homicidios en ocasión de robo. De la cantidad de asaltantes fallecidos no tenían registro.

Mes a mes

El relevamiento realizado por Clarín en base a publicaciones periodísticas arrojó que en enero hubo 18 hechos de inseguridad que terminaron en muerte, cinco más que el mismo mes del año pasado.

Uno de los más conmocionantes fue el de Joel Alexis Quinteros (25), padre de un nene de 5 años y empleado de Fate, asesinado el 28 de enero en Pablo Nogués, partido de Malvinas Argentinas. El caso combina elementos que aparecen con frecuencia en los robos en el Conurbano: celular, parada de colectivo, motochorros.

En septiembre el Gobierno anunció la construcción de 4.000 paradas seguras en la Provincia con wifi, cámaras de seguridad, botón antipánico, entre otros accesorios, por un monto de 3.700 millones de pesos. Todavía no instalaron ninguna.

Febrero dejó 17 homicidios durante robos en territorio bonaerense, diez más que en 2020. Los primeros diez días fueron particularmente violentos, con trece casos.

Uno de los más recordados es el que tuvo como víctima a Marcos Ignacio Mendoza (18), asesinado durante una entradera en su casa en Ezpeleta, partido de Quilmes. El chico intentó defender a su familia de tres ladrones que los sorprendieron cuando entraban la camioneta al garaje. Le dispararon un tiro en el pecho y huyeron.

La modalidad de entradera es una de las más características del Conurbano. Casi siempre se dan a la noche, cuando las víctimas llegan a su casa y guardan el auto. El año pasado, de acuerdo al Sistema Informático de Denuncias del Ministerio de Seguridad bonaerense hubo 6140 casos en todo el año, es decir uno cada una hora y media.

Además del asalto en el que murió Marcos Mendoza, en febrero hubo otras dos entraderas fatales con la casualidad que ocurrieron el mismo día y en Merlo. En esos episodios mataron a Gabriel Omar Medina (45) y a Carmen López de Vargas (61).

En marzo también hubo un incremento fuerte de las muertes por inseguridad. 18 hechos contra 11 de hace un año. Cabe aclarar que el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) fue decretado el 20 de marzo, por lo que en este caso la comparación de un mes y otro está condicionada.

Liberado por el covid

El de María Rosa Daglio fue uno de los crímenes más conmocionantes por las circunstancias en las que ocurrió: un ataque motochorro en Ramos Mejía, partido de La Matanza, protagonizado por un ladrón que fue liberado por el coronavirus y debía estar preso.

Alejandro Miguel Ochoa (55) había sido condenado a ocho años y medio de prisión en 2017 por dos robos a mujeres bajo la modalidad motochorro en Mar del Plata. lo liberaron el 30 de abril del año pasado con la excusa de la pandemia.

En octubre Ochoa volvió a robar y lo detuvieron pero, insólitamente, le dio a la Policía una identidad falsa y lo soltaron. Cuando se dieron cuenta de quién era no lo pudieron ubicar y tenía pedido de captura desde noviembre.

El 19 de marzo Ochoa reapareció en Belgrano al 300 de Ramos Mejía, tironeó de la cartera de Daglio, que hablaba por celular en la vereda, y la arrastró por el piso. Le provocó fractura de costillas y lesiones en el bazo. Una hemorragia interna le terminaría causando la muerte.

A Ochoa lo detuvieron en una casa de Castelar, partido de Morón, donde también estaba la moto que aparece en el video del robo.

Un antecedente de una excarcelación por el coronavirus que derivó en muerte es el de Juan Corvalán (30), el ladrón que mató a Mirta Barcia (64), empleada municipal de Cañuelas, el 8 de septiembre del año pasado.

La víctima, que además era profesora de folklore, fue sorprendida cuando despedía a una amiga en la puerta de su casa, cerca de las 22. En ese momento aparecieron dos ladrones que le robaron el celular.

La mujer intentó defenderse y, cuando escapaban, Corvalán le disparó dos veces. La imagen de los sospechosos quedó registrada por las cámaras de seguridad y tres días después fueron detenidos.

Según reveló Clarín en un informe del 26 de marzo pasado, en la Provincia de Buenos Aires hay 168 presos liberados por el fallo Violini que no se sabe dónde están y aparecen cuando son detenidos por reincidir en el delito.

En cuanto a los municipios donde ocurrieron los hechos, el que más sufrió la inseguridad fue La Matanza, con 16 casos, seguido por Moreno, con 7; Quilmes, 5; Merlo, 4; Almirante Brown y Malvinas Argentinas, 3; Morón, Pilar y José C. Paz, 2; y Avellaneda, Berazategui, General Pueyrredon, La Plata, Lanús, Lomas de Zamora, Presidente Perón, San Martín y San Miguel 1.

GL