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      Jair Bolsonaro insiste: la pandemia de coronavirus fue “sobredimensionada”

      Ante empresarios, el presidente de Brasil, el segundo país del mundo con más muertos por Covid-19, insistió en minimizar el virus y en criticar las cuarentenas.

      Redacción Clarín

      El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, insistió este miércoles en que la pandemia del coronavirus ha sido "sobredimensionada", en momentos en que el país suma más de 150.000 muertos por Covid-19 y sigue sin superar la crisis sanitaria.

      "Entramos en 2020 y tuvimos el problema de la pandemia que, en mi entendimiento, fue sobredimensionada", declaró el mandatario en una videoconferencia con representantes de la Federación de Industrias del Estado de Río de Janeiro (Firjan).

      El líder de la ultraderecha brasileña dijo que si el gobierno y "parte del empresariado" hubieran aceptado "el quédese en casa, que la economía viene después", Brasil "estaría ciertamente en una situación bastante complicada".

      Además, destacó el trabajo del actual ministro de Salud, el general Eduardo Pazuello, que llegó al cargo tras las renuncia de otros dos ministros que renunciaron en plena crisis sanitaria y tras graves diferencias con el presidente.

      "En el tema de la salud también tuvimos algún éxito en comparación al resto del mundo, en especial cuando colocamos a un general en el Ministerio de Sanidad", aseguró el presidente, y remarcó que Pazuello, que no tiene ninguna experiencia médica, es un "gran gestor" que está haciendo un "trabajo excepcional".

      Féretros en un cementerio de Manaos, en el estado de Amazonia, uno de los más castigados por el coronavirus en Brasil. Foto: AFPFéretros en un cementerio de Manaos, en el estado de Amazonia, uno de los más castigados por el coronavirus en Brasil. Foto: AFP

      Sin embargo, el mandatario no hizo mención alguna a los casi 151.000 muertos y 5,1 millones de contagios de coronavirus que registra el país, el segundo más afectado detrás de Estados Unidos.

      ​Los especialistas coinciden en que las cifras podrían ser mucho peores si no fuera por las restricciones a la circulación de personas adoptadas por los estados y municipios, que fueron y siguen siendo duramente criticadas por el presidente.

      También reiteró que "desde el comienzo" de la pandemia sostuvo que "la cuestión del virus y el desempleo debían ser tratados con la misma responsabilidad y simultáneamente", lo que a su juicio no fue hecho por alcaldes y gobernadores que decretaron cuarentenas y otras medidas de aislamiento social que llegaron a paralizar la economía.

      Esas medidas ya han sido casi totalmente levantadas en todo el país, pero fueron rígidas entre los meses de marzo y junio, cuando la mayoría de las actividades productivas se mantuvieron en niveles mínimos.

      Una calle del centro de San Pablo, este semana. La cuarentena quedó atrás. Foto: EFEUna calle del centro de San Pablo, este semana. La cuarentena quedó atrás. Foto: EFE

      Algunos bancos privados llegaron a prever que el Producto Bruto Interno (PBI) de Brasil perdería hasta un 14% este año debido a esa paralización, pero las proyecciones del gobierno y de los analistas financieros sitúan ahora esa previsible caída en torno al 5%.

      "La economía se está recuperando ahora" y "de forma mucho mejor de lo que podíamos esperar", garantizó Bolsonaro, quien citó algunos datos oficiales sobre una mínima recuperación de la tasa de empleo, pese a que el paro aún es de un elevado 13%, con unos 13 millones de personas sin trabajo y otros 40 millones en la informalidad.

      También este miércoles, pero en un breve encuentro con grupos de seguidores a las puertas de su residencia oficial, en Brasilia, el presidente se refirió a la fuerte alza que han sufrido en las últimas semanas los precios de los alimentos básicos y lo atribuyó igualmente a la parálisis económica de los meses anteriores.

      "Todos decían que había que quedarse en casa que la economía la veíamos después. Ahora llegó la cuenta y hay que pagarla", declaró sobre el precio del arroz, que ha subido un 20% desde enero.

      También reiteró que su gobierno no regulará los precios de los alimentos de la canasta básica. "En Venezuela está todo regulado y no tienen un grano de arroz para comer", declaró.


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      Fuente: EFE y DPA

      CB